Lua Menstrua, la Sabiduría de nuestro Ciclo Menstrual.

Lua Menstrua, la Sabiduría de nuestro Ciclo Menstrual.

El ciclo menstrual y sus arquetipos.

El ciclo menstrual es un fenómeno físico-psicoemocional que nos conecta profundamente con nuestro cuerpo y con la naturaleza cíclica de las cosas.

Como a mí siempre me gusta decir, el ciclo menstrual es un examen mensual que nos habla sobre el estado de nuestra salud.

A lo largo de la historia, este ciclo fue usado como calendario, ya que está estrechamente conectado con las fases lunares; las mujeres antiguas usaban este conocimiento para representar cada etapa (la menstruación, el embarazo, la maternidad,...) como testigo del paso de la juventud a la sabiduría ancestral y como una refuerzo y honra a su conexión con el entorno natural.

Los arquetipos menstruales reflejan esta periodicidad y si profundizamos un poco y aprendemos a leerlos, guardan un conocimiento muy poderoso.

 

Los Arquetipos menstruales y la Luna.

Dentro de la psicología junguiana, Carl Jung identificó varios arquetipos universales que representan las diversas fases del ser humano. En el caso de las mujeres, estos arquetipos se reflejan de manera profunda en los ciclos menstruales, con una ciclidad lunar/mensual, mientras que en los hombres, el ciclo es solar/anual, distribuyéndose estas oscilaciones energéticas a lo largo de todo un año.

En las fases menstruales se distinguen 4 arquetipos: la Doncella, la Madre, la Hechicera y la Anciana. Cada uno de estos arquetipos resuena con diferentes estados que experimentamos durante cada mes, a pequeña escala, y durante toda nuestra vida, a gran escala.

 

1. La Doncella, la fase pre-ovulatoria:

 

🌿 La Doncella es la fase de mayor impulso y renovación. Tras la menstruación, el cuerpo y la mente despiertan con energía renovada, listas para conquistar nuevos objetivos.

💫 En esta fase nos sentimos:

✔ Más seguras y con una gran capacidad de concentración y enfoque.
✔ Extrovertidas y sociables, con ganas de interactuar y explorar nuevas experiencias.
✔ Llenas de vitalidad física y mental, lo que la convierte en la etapa ideal para iniciar proyectos, establecer metas y materializar ideas.
✔ Con una gran energía creativa, expansiva y emprendedora, perfecta para asumir retos con valentía y determinación.

🌸 Esta fase menstrual está vinculada con la Primavera y la Luna Creciente, enfatizando toda esta energía de expansión y crecimiento. En el arquetipo de la Doncella la energía Yang (masculina) se encuentra en su zenit, caracterizada por la expansión, el dinamismo y la proyección hacia el exterior.

🔥 En esta fase, el deseo sexual se despierta de manera espontánea y despreocupada. Se siente desde un lugar de curiosidad y exploración, disfrutando del placer sin ataduras ni expectativas.

💖 La autoestima crece, permitiéndote expresar tu autenticidad sin miedo al juicio. Es un momento ideal para conectar con el cuerpo, descubrir nuevas formas de disfrute y sentirte poderosa en tu piel.


2. La Madre, la fase ovulatoria:

Toda la energía que explotó en la fase previa del arquetipo de la Doncella, la pre-ovulación, alcanza su punto más alto de energía y vitalidad en el arquetipo de la Madre, la ovulación. Aunque seguimos enfocando la energía hacia fuera (energía masculina Yang), ya no sentimos esa necesidad de expansión si no de estacionarnos en nuestros vínculos, cuidarlos y disfrutarlos. 

💛 La Madre es la energía del amor incondicional y la entrega. Su fuerza radica en su capacidad de nutrir, sostener y cuidar, tanto a nivel físico como emocional y espiritual.

🌿 La Madre está profundamente unida a la Tierra, simbolizando la fertilidad, la abundancia y la manifestación de la vida en todas sus formas. Su energía nos recuerda la importancia de sostener y ser sostenidas, de dar y recibir en equilibrio.

Durante esta fase, se desarrolla un sentido de propósito y servicio. Es el momento de canalizar la energía en acciones concretas que beneficien no solo a una misma, sino también al entorno.

En esta fase:

✔ La energía se orienta hacia los demás, despertando el deseo de compartir, proteger y cuidar a quienes nos rodean.
✔ Aumenta la empatía y la armonía emocional, facilitando la comunicación y el fortalecimiento de vínculos.
✔ Se potencian la creatividad y la productividad, siendo un momento ideal para materializar proyectos e ideas.

La Madre y su Conexión con la Naturaleza

Sexualidad y Autoestima en la Fase de La Madre

La ovulación es el momento en el que el cuerpo se encuentra más receptivo y atractivo. La autoestima se fortalece y la seguridad en una misma crece.

🔥 Es una fase de sensualidad natural y magnetismo, donde el placer se experimenta desde la conexión, el cariño y la intimidad profunda.

La Madre y la Energía de la Luna Llena

🌕 La Luna Llena representa la máxima expansión de energía, al igual que esta fase del ciclo. Es el momento ideal para:

✔ Manifestar y materializar deseos y proyectos.
✔ Conectar con la generosidad y el amor incondicional.
✔ Fortalecer lazos afectivos y expresar gratitud.

💫 Esta etapa nos invita a recordar que la verdadera fortaleza radica en la capacidad de dar amor, sostener y crear desde la plenitud.

 

3. La Hechicera, la fase pre-menstrual:

 

La fase pre-menstrual es una etapa de gran intensidad emocional y creativa, donde las energías que podrían haber sido destinadas a la gestación de una nueva vida se canalizan hacia la creación artística, la intuición y el desarrollo personal. 

Si en las dos primeras fases experimentábamos la energía Yang, en el arquetipo de la Hechicera nos adentramos en su opuesto complementario, la energía Yin o polaridad femenina. Es una energía de introspección, pasividad y gestación donde trabajamos con aquello que no es visible, el mundo onírico, el inconsciente y la intución.

⚡ La energía de La Hechicera es poderosa y disruptiva. Puede manifestarse como un torbellino emocional que nos impulsa a explorar las sombras, cuestionar lo establecido y romper con todo lo que ya no nos sirve.

A diferencia de la etapa de la Doncella y la Madre, donde la energía es extrovertida, expansiva y proyectada hacia el exterior (Yang), La Hechicera dirige su fuerza hacia el interior (Yin). Es un período en el que disminuye la energía física, pero la mente se vuelve hiperactiva, lo que puede generar dificultades para relajarse y conciliar el sueño.

✨ Se intensifica la creatividad, la magia, la conexión con lo espiritual y la consciencia del propio poder interior. También aumenta la actividad onírica, lo que puede traer revelaciones y mensajes importantes desde el inconsciente.

Sexualidad y Energía Femenina de La Hechicera

Durante esta fase, la sexualidad se vuelve más intensa y magnética. La Hechicera es segura de sí misma y de su poder sexual, manifestándolo de manera más agresiva, apasionada y exigente. Su energía seductora es tan fuerte que puede atraer y asustar al mismo tiempo.

🌒 Es el momento de conectar con nuestra esencia más indómita, esa parte de nosotras que no teme expresarse con autenticidad.

Esta fase se asocia con el otoño y la Luna Menguante, un período de desprendimiento, purificación y preparación para la muerte/renacimiento. Es el momento ideal para:

✔ Eliminar lo que ya no nos sirve, tanto a nivel físico como emocional.
✔ Nutrirnos conscientemente para afrontar la próxima fase de recogimiento.
✔ Evaluar qué aspectos de nuestra vida necesitan transformarse.

Muchas mujeres experimentan en esta etapa los síntomas del llamado Síndrome Pre-menstrual (SPM), un fenómeno que, lejos de ser una simple molestia, puede verse como una manifestación de la energía de La Hechicera: intensidad emocional, hipersensibilidad y un rechazo profundo hacia lo superficial y lo mundano.

🌿 En lugar de luchar contra esta energía, podemos aprender a fluir con ella y aprovechar su potencial transformador.

4. La Anciana, la fase menstrual:

 

En la fase de la Anciana, las energías dejan de buscar la expresión externa y se vuelven completamente introspectivas e intuitivas. Es un período de retiro, descanso y conexión con el inconsciente. Los sueños se intensifican, los pensamientos racionales disminuyen y se activa una sensibilidad profunda que nos permite sanar heridas emocionales y soltar lo que ya no nos sirve.

Es la etapa del invierno interno, con la Luna Nueva como regente, donde el cuerpo y el alma se preparan para un nuevo ciclo. En este momento, podemos sentirnos más vulnerables, pero también más conectadas con nuestra verdadera esencia. La sabiduría de La Anciana nos enseña la importancia de aceptar el pasado y abrazar la transformación.

Así como la Doncella representa la máxima expresión de la energía Yang (activa y expansiva), La Anciana nos lleva al extremo opuesto: la energía Yin (receptiva, pausada y espiritual). En esta fase:

✔ Los procesos mentales se ralentizan, permitiendo una mayor conexión con la intuición.
✔ Las emociones afloran con fuerza, aumentando la sensibilidad y la empatía.
✔ El mundo exterior puede resultar abrumador, lo que invita a la introspección y el descanso.

Durante esta fase, el deseo sexual se transforma en una necesidad de conexión profunda y amorosa. La intimidad adquiere un matiz más emocional y espiritual, donde se busca compartir sentimientos genuinos de amor y complicidad.

💜 La fase de La Anciana no es un final, sino un renacer. Es el cierre de un ciclo que nos permite empezar de nuevo con mayor claridad y sabiduría.

 

El ciclo menstrual como herramienta de Autoconocimiento y Sanación.

 

Ya hemos visto que cada arquetipo nos brinda información muy valiosa que podemos empezar a usar en cualquier momento. Hay muchas técnicas para experimentar la energía que nos brindan las 4 diosas:

✔ Diarios donde registrar cómo nos sentimos en cada una de las fases y qué sueños hemos tenido.
✔ Ajustar la actividad física en función de nuestra energía.
✔ Acompañar los ejercicios rituales de limpieza con plantas y hierbas que afiancen la conexión con la naturaleza.
✔ Talleres de reconexión con el útero y el Arte Menstrual como potente medio de sanación.

Muchas mujeres utilizamos estas técnicas para sanar la relación con nuestro cuerpo, especialmente después de haber experimentado trauma o desconexión con nuestra feminidad. La creación artística puede ayudar a transformar el dolor o la incomodidad de los ciclos en una forma de expresión, permitiéndonos el reencuentro del amor por nosotras mismas y la conexión con la Tierra y el Cosmos.

Y por último te recomiendo dos libros que me ayudaron mucho a iniciarme en este proceso y entenderme mejor:

  1. Luna Roja de Miranda Gray
  2. Cuerpo de Mujer, Sabiduría de Mujer de la Dra. Christiane Northrup

 

Deseo de todo corazón que este artículo te inspire y te atrevas a profundizar en tu ciclo menstrual y recuerdes que la Sabiduría ya está dentro de ti.

 

¡Feliz Ciclo!

 

 


 

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